El desayuno continental es muy bueno y vale la pena probarlo, así como la cómoda cama que asegura un buen descanso.

Un toque especial en las mañanas

Despertar con una vista espectacular de la ciudad y un personal siempre atento que me permitió hacer el check-in antes. El desayuno buffet tenía una buena variedad.

Sin embargo, la zona a veces se siente insegura y las opciones de comida eran limitadas, lo que complicó un poco mis cenas.

Recorrimos algunos de los lugares increíbles de Milán y las vistas fueron impresionantes. La habitación era espaciosa, perfecta para mi familia, y proporcionó un buen descanso después de días explorando. Lo mejor fue la cercanía a lugares interesantes, lo que hizo que los paseos fueran agradables.

A mis hijos les hubiera gustado que tuvieran más opciones de comida cerca del hotel, ya que caminar 20 minutos para encontrar un restaurante era un poco complicado. Además, la limpieza de algunas áreas podría mejorar.

La habitación era cómoda y contaba con todas las comodidades necesarias, pero la zona a menudo se sentía insegura y había pocas opciones de comida cercanas. Aprecio la atención del personal al permitirme hacer el check-in antes y la limpieza diaria fue satisfactoria.

Me alojé en el hotel Blaise & Francis y, sinceramente, tenía expectativas más altas. La habitación era bastante amplia y estaba limpia, lo cual fue un buen punto. La cama king size era cómoda, lo que ayudó a descansar bien después de días agotadores. La proximidad al metro facilitó los desplazamientos por la ciudad, aunque la zona no se sentía muy segura. Hubo varios momentos en los que vi gente inusual en la calle, lo que me hizo sentir incómodo paseando por los alrededores. Aunque tenía acceso a un Carrefour express y un McDonald's a unos 15 minutos caminando, sinceramente me habría gustado tener mejores opciones de comida más cerca del hotel. La calefacción era ruidosa durante la noche, lo que interrumpió el sueño en un par de ocasiones. También, me sorprendió la falta de información sobre la tasa turística que pagué al salir, ya que no me informaron al hacer el check-in, lo cual fue una sorpresa molesta. En general, aunque no fue una experiencia horrible, no siento que cumpla con las expectativas de un hotel de cuatro estrellas.

una estancia con altibajos

La habitación era muy cómoda, con una gran vista a la ciudad que hacía que las mañanas fueran agradables. El personal fue excepcionalmente amable y me permitió hacer el check-in antes de lo previsto, lo que fue muy considerado. La atención que recibí al llegar fue un punto destacado de mi estancia.

Un poco alejado de la parada de metro.

el wifi era un poco inestable pero la habitación era amplia y limpia además el personal fue super amable y me dejaron hacer el check-in antes. el desayuno buffet fue delicioso y con mucha variedad. definitivamente volvería.

la hab era super comfy, todo limpio y tenía todo lo necesario. el personal fue mega amable, hasta me dejaron hacer check-in antes. la vista de la hab era chida, le daba un toque especial a las mañanas. el desayuno buffet estuvo buenísimo, con mucha variedad. estuvo bien ubicado a unos 10 min a pie del metro.

la zona no se sentía muy segura a veces y no había muchas opciones de comida cerca.

Durante mi estancia, la habitación fue muy confortable y espaciosa, con un baño bien equipado que incluía bañera y bidet. El desayuno buffet ofrecía una excelente variedad de opciones, tanto dulces como saladas, y la atención del personal fue muy profesional y servicial en todo momento.

Un poco alejado de la parada de metro, a unos 15 minutos caminando.

seguro que volveré

Habitación amplia y muy cómoda, con baño que tenía bañera y bidet. El servicio de limpieza fue aceptable y tenían un buen desayuno buffet con variedad de dulces y salados. Muy buena atención del personal. Estaba a un kilómetro de la parada de metro, un poco alejado pero servía para desconectar.